Cuando se involucra a los usuarios finales de una investigación en el diseño, la implementación y la evaluación de dicha investigación, se habla de un proceso de cocreación dialógica (RDCP). Ello se asocia a gran cantidad de resultados positivos, como una mayor eficacia de la intervención, sostenibilidad y crecimiento psicológico entre los colaboradores. Además, se mejora también la creación de conocimiento científico.
Dentro del Marco de Innovación en Investigación de la UE, se enfatiza el valor de este enfoque y se recomienda que las personas investigadoras adopten la cocreación de conocimiento y la cocreación en la implementación de políticas. Además, se sugiere que este enfoque es particularmente relevante para trabajar con personas de grupos vulnerables, cuyas voces a menudo están ausentes en las investigaciones y los debates sobre políticas.
Sin embargo, se ha prestado poca atención a cómo se desarrolla la cocreación en la práctica. Para dar luz en este sentido, el artículo “The REFUGE-ED Dialogic Co-Creation Process: working with and for REFUGE-ED children and minors” proporciona una revisión del marco metodológico implementado por H2020 REFUGE-ED (2021-2023), que se llevó a cabo en colaboración con comunidades de migrantes, refugiados y solicitantes de asilo. El proyecto implementó el proceso de cocreación dialógica en 46 entornos educativos de seis países europeos y concluye que el RDCP tiene potencial de sostenibilidad y replicabilidad en contextos diversos.
El objetivo principal de REFUGE-ED es identificar, cocrear y evaluar prácticas basadas en evidencias en educación (formal, no formal e informal) y prácticas de apoyo psicosocial y de salud mental (SMAPS) que han demostrado promover el éxito educativo, el bienestar y el sentido de pertenencia y cohesión social en todos los niños y niñas (0-18 años) en situaciones migratorias y de asilo.
Para poder llevar a cabo la cocreación en REFUGE-ED se han tenido en cuenta diferentes aspectos:
- Las prácticas utilizadas están avaladas por su evidencia de impacto social. Es decir, ya existen pruebas sustentadas científicamente de que un determinado conocimiento ha informado políticas o acciones que han generado mejoras en la sociedad.
- Los enfoques efectivos identificados fueron: crear un espacio seguro, proporcionar psicoeducación y facilitar la expresión creativa.
- En cuanto a las prácticas en el campo de la educación para las que existe evidencia de impacto social, se trata de las actuaciones educativas de éxito (AEE) (tertulias literarias, grupos interactivos, participación educativa de la comunidad, formación de familiares, formación pedagógica dialógica para docentes y modelo dialógico de prevención y resolución de conflictos).
- Se trabajó desde una perspectiva comunitaria, procurando garantizar que los resultados de la investigación sirvieran al público, así como a las instituciones públicas y gubernamentales. Se procuró contar en todo el proceso con las voces de los usuarios finales, incluyéndolas en la creación del conocimiento científico.
- Se utiliza la metodología comunicativa de investigación, que tiene un gran potencial para lograr impacto científico, social y político. Un elemento central de esta metodología es la participación activa de los usuarios finales a lo largo de todo el proceso de investigación, como contribuyentes a una comprensión más rica de sus “mundos de vida” y a la creación de soluciones para políticas sociales.
- La base de esta metodología es la relación dialógica entre el investigador y los actores sociales o sujetos de investigación. El primero proporciona el conocimiento científico disponible sobre el tema que investiga, mientras que el segundo ofrece una visión de su creación de significado en relación con la vida cotidiana y sobre los temas investigados.
- Se utiliza un diálogo multidireccional (Vieites-Casado et al, 2021): se ha podido llevar a cabo a través de estructuras formales (tertulias pedagógicas dialógicas, reuniones de evaluación, eventos organizados para dar conocer el proyecto…) y a través de contactos informales alentados y sostenidos por escuelas y formadores (visitas recíprocas, intercambio de vídeos, grupos de WhatsApp…).
El proceso dialógico de cocreación en el proyecto REFUGE-ED se ha basado en cómo se han ampliado y aplicado las AEE en todos los contextos y cómo se introdujeron los principios del aprendizaje dialógico. Estos principios han servido como puntos de control de calidad, no como fases fijas e inmóviles. Fueron la base de la metodología comunicativa del proceso de investigación y cocreación en cada sitio piloto de REFUGE-ED. En definitiva, el proceso de cocreación dialógica utilizado en REFUGE-ED revela que es necesario un diálogo continuo e interconectado en los procedimientos de investigación científica, incluyendo siempre las voces de los usuarios finales sobre el terreno.