Siguiendo con la serie 10 principios para que las familias puedan ayudar a sus niñas o niños a aprender y tener éxito en la escuela, de la guía de la APA (American Psychological Association), hoy comentaremos el principio número tres:

Principio 3. El aprendizaje ocurre en muchos contextos, incluyendo la escuela, el hogar y la comunidad.

El aprendizaje en la infancia ocurre no solo en las aulas sino en una gran variedad de contextos, incluyendo sus hogares, la comunidad, compañeras y compañeros, etc. El aprendizaje surge cuando el niño o niña tiene interacciones con personas diferentes a él o ella. Como miembro de su familia, tú juegas un papel crucial en enseñarle, reforzar conceptos tanto en casa como fuera. Por ejemplo, puedes practicar con la niña o niño habilidades matemáticas (como dividir) en diferentes contextos y lugares (el vecindario, una tienda, el parque…). 

¿Qué puede hacer la familia? 
  • Trabaja con los maestros y maestros para extender en casa y la comunidad las explicaciones de clase. Si en clase están dando la suma con un dígito, practícalo con él o ella en casa y en numerosos lugares y contextos. Por ejemplo, pídele que ponga en la mesa 4 tenedores y 4 cucharas, y luego pedirle que sume el total de cubiertos.
  • Comunícate con los y las maestras: compartir información sobre el niño o niña, sus intereses, experiencias, conocimientos previos, etc. ayudará al o la docente a que conecte sus ideas previas con el nuevo aprendizaje que vaya a trabajar en clase. Si el docente conoce las ideas previas y los intereses del alumnado, le ayudará a relacionar los temas con ello y serán más interesantes para el niño o niña.
  • Proporciónale experiencias y oportunidades de aprendizaje fuera del colegio. Por ejemplo, visitar museos, pasear por la naturaleza o viajar a nuevos lugares. Por ejemplo, si en un museo que habéis visitado ha visto diferentes tipos de roca, le resultará más fácil comprender temáticas relacionadas en la escuela sobre geología. 
  • Ayúdale al niño o niña a hacer conexiones entre lo que aprende en clase y sus experiencias diarias. Preguntando a su maestro o maestra qué temas van a trabajar en clase próximamente, puedes comenzar a enseñarle ese tipo de experiencias en su día a día. Por ejemplo, si van a dar en clase las fracciones, puedes anticipar y enseñarle fracciones con porciones de pizzas en casa o restaurantes. 
  • Involucra al niño o niña en actividades diarias de aprendizaje en casa y en diferentes entornos de la comunidad. Así aprenderán, a su nivel, nuevos conceptos de personas adultas de su entorno. Pueden servir, a parte de conceptos académicos, también tareas como organizar una lista de compra u otras actividades del hogar.
  • Apoya su aprendizaje en casa respecto a los temas que tratan en la escuela. Las maestras y maestros estamos encantados de ofrecer información sobre lo que se está trabajando, lo que se va a trabajar y cómo se puede reforzar ese aprendizaje en casa. Se puede preguntar a su maestro o maestra sobre recursos respecto a los contenidos de las asignaturas y actividades extra que pueden ayudar. 

Haciendo uso de estas guías con sus menores, la familia estará extendiendo sus aprendizajes en sus diferentes entornos, en su mundo real; siendo esto muy importante porque también aprenden así su rol y el de los demás, la forma en que las personas interactúan, cooperan, se apoyan unas a otras… Estas interacciones, extensión de tiempos y espacios generarán aprendizaje en múltiples contextos que desarrollarán una mejora en sus habilidades para resolver problemas, ganar creatividad y conseguir éxito académico y en la vida a largo plazo. 

[Puedes leer aquí los anteriores artículos de la serie]
[Imagen: Freepik]
image_pdfPDF
+ posts

Maestro de educación primaria y especialista de inglés