Las personas experimentan estrés en diferentes momentos de sus vidas, debido a diversos factores como el tráfico, preocupaciones por la salud, discusiones, entre otros. Estas situaciones desencadenan una respuesta hormonal que causa cambios fisiológicos significativos. Algunas personas son conscientes de su estrés, mientras que otras pueden no detectarlo. Reconocer los signos de estrés puede ayudar a contrarrestar su impacto y, por ende, prevenir problemas de salud.
Harvard Medical School informa que puedes realizar algunas verificaciones rápidas en tu cuerpo para determinar si estás experimentando estrés:
– ¿Tu respiración es superficial? Coloca una mano en el pecho y la otra en el vientre. Observa qué mano se mueve al inspirar y espirar. Las respiraciones calmadas llevan el aire profundamente a los pulmones, expandiendo tanto el pecho como el vientre, mientras que las respiraciones superficiales y tensas solo afectan al pecho.
– ¿Sientes tensión en el cuello y los hombros? Respira profundamente. Al exhalar, eleva lentamente los hombros hacia las orejas y luego muévelos hacia atrás y hacia abajo para relajarlos. ¿Notas que los hombros están más bajos que hace un momento?
– ¿Estás apretando la mandíbula o los puños? Realiza una inhalación profunda y luego relaja la mandíbula hasta separar ligeramente los labios. Haz otra inhalación profunda y relaja las manos hasta que los dedos estén ligeramente separados.
La universidad proporciona un formulario que permite a cada individuo evaluar su nivel de estrés en cualquier momento a través de síntomas físicos, comportamentales, emocionales o cognitivos. Basta con marcar los síntomas en el formulario para determinar si se está experimentando estrés. Aunque este formulario puede ser útil, se recomienda que, en caso de experimentar estrés de forma continua, la persona lectora consulte a un médico para una evaluación adecuada.
Formulario básico para el reconocimiento de algunas señales de advertencia sobre el estrés: