La ciudadanía tiene un creciente acceso abierto a la información científica sobre educación y, por tanto, expresa un rechazo creciente a las políticas que se basan en bulos que generan malos resultados educativos y no en las evidencias científicas que los mejoran. Cuando no tenían esa información, los diferentes sectores de la ciudadanía apoyaban las políticas educativas de quienes tenían su misma ideología, pero ahora no las apoyan si se basan en ocurrencias en lugar de en las evidencias científicas de impacto social, en las que han demostrado que mejoran la educación y la sociedad. El Periódico Educación nació para poner esas evidencias al alcance de toda la ciudadanía. Quienes las leen y las usan ya están mejorando, mientras que quienes usan los bulos que suelen difundir otros medios empeoran los resultados.