Recientemente un artículo publicado en la prensa daba noticia de una asignatura de humanidades para estudiantes de medicina de la Universidad Pompeu Fabra. En sus contenidos se lee literatura, como La muerte de Iván Ilich de Tolstoi, con la finalidad de que las y los futuros profesionales de la salud comprendan las historias personales que hay detrás de cada paciente, empatizando y sabiendo acompañar con las palabras adecuadas para cada situación. En nuestro país, algunas universidades empiezan a incluir las humanidades y la literatura en las carreras científicas y técnicas, queriendo evitar el riesgo de crear una sociedad en la que los avances científicos y tecnológicos no vayan de la mano del humanismo.
En el año 2001, la profesora Rima Rudd de la School of Public Health de la Universidad de Harvard inició tertulias dialógicas con sus estudiantes. Entre las tertulias dialógicas, las literarias construyen el significado y el conocimiento de forma colectiva a través de la lectura y el diálogo de todas las personas participantes en base a las mejores creaciones literarias de la humanidad. La Universidad de Harvard no solo fue pionera en implantar las tertulias con sus estudiantes, sino que también lo hizo con sus trabajadores. El Bridge Program dirigido a la educación y formación de las y los trabajadores de esa universidad implementó tertulias literarias dialógicas. Estas fueron promovidas por investigadoras del National Center for the Study of Adult Learning and Literacy (NCSALL). En estas tertulias, personas con niveles educativos básicos, como las trabajadoras de la limpieza, leían y dialogaban también las obras de la literatura universal. En el marco del NCSALL de Harvard, Marta Soler leyó en el 2001 su tesis doctoral sobre las tertulias literarias dialógicas con personas sin titulaciones académicas. Una de las revistas más prestigiosas en la investigación educativa acaba de publicar una revisión sistemática de 46 artículos científicos sobre el impacto de las tertulias literarias dialógicas. Los resultados muestran cómo estas tertulias han contribuido a desarrollar, en participantes de todas las edades y contextos muy diversos, una mayor capacidad para empatizar con los otros, promoviendo relaciones de apoyo y solidaridad.
Las tertulias literarias dialógicas son una actuación educativa basada en evidencia de impacto social que podría contribuir sin duda a que los y las futuras profesionales de la salud fortalezcan la capacidad de empatía necesaria para actuar siempre desde la ciencia, la profesionalidad y la humanidad.
