El reciente webinar, ”Crisis en la salud mental de adolescentes”, del que vamos a compartir algunas claves, pertenece al Askwith Education Forum, una serie de conferencias en las que participan personas que están liderando la educación, sobre temas que afectan a las escuelas, universidades, familias y comunidades. Se han organizado desde 1998 por la Facultad de Educación de Harvard (HGSE). Hoy en día se comparten en abierto y quedan grabadas en el canal de YouTube de Harvard Education.
Las personas invitadas para esta ocasión son cuatro profesionales del campo de la educación y salud mental. Se puede acceder en este enlace.
Recordemos cómo define la OMS la salud mental: “es un estado de bienestar mental que permite a las personas hacer frente a los momentos de estrés de la vida, desarrollar todas sus habilidades, poder aprender y trabajar adecuadamente y contribuir a la mejora de su comunidad.”
A continuación compartimos algunas claves que destacan en el webinar:
- La soledad tiene repercusiones neurológicas. En una encuesta reciente, el 40% de jóvenes de 18 a 25 años dicen sentirse solos más de la mitad del tiempo en las últimas tres semanas. La soledad está muy conectada con la depresión y la ansiedad. Hay que cuidar a los cuidadores, porque ellos también se sienten solos. Hay que ofrecer programas de apoyo que conecten a las familias y les aporten herramientas desde que sus hijos son pequeños y a lo largo de toda la infancia y adolescencia.
- Encontrar un sentido y significado a la vida es crucial para sentirse bien y seguir adelante.
- Las relaciones personales son la clave. Asegurarse de que al menos tienen un amigo o amiga. Crear ambientes seguros e inclusivos en las escuelas, y llevar a cabo actuaciones planificadas para desarrollar relaciones de calidad y no dejarlas al azar.
- Mapear los centros: asegurar que cada alumno o alumna tiene a un adulto de referencia. Puede ser la profesora, orientadora, entrenador, profe de ballet, monitor de la parroquia, profe de la clase de canto, del conservatorio o incluso el o la conserje. De hecho, hay conserjes que hacen un trabajo excelente. Es importante entrenar a todas estas personas que tienen contacto con niñas, niños y adolescentes para poder afrontar los problemas de salud mental con los que se encuentran. Simplemente con que estas personas traten con afecto a los niños y niñas, les den su cariño, ya curan sin hablar. El amor cura. Se trata de crear vínculos y relaciones fuertes entre adolescentes y adultos que se preocupan por ellos y ellas.
- Preocuparse por los demás y hacer cosas por los demás es beneficioso para la salud. Nos permite sentirnos orgullosos de nosotros y nosotras mismas. Esto se puede facilitar al hacer voluntariados o cosas por los demás.
- El sentimiento de pertenencia es muy importante. Cuanto más se hable de cómo crear ambiente de pertenencia, seguridad… más se va consiguiendo.
- Es necesario enseñar a la población, adolescentes incluidos, la diferencia entre el sufrimiento que es innecesario, que no vale la pena, y el sufrimiento inevitable, que habrá que superar.
- Tenemos que dialogar con los y las adolescentes y hacerles saber que en la vida van a tener momentos de estrés, de preocupación, como los adultos. Hay que validar sus emociones, transmitirles que pueden pasarlo mal, se van a enfadar; que sean conscientes de que van a tener altibajos, van a tener un mal día y tendrán que superarlo; pero no transmitirles que eso les va a derrumbar, que es el fin del mundo.
- Hay centros educativos (Trauma-informed schools) en los que se tratan estos temas con toda la comunidad educativa. El estudiantado se siente seguro, cuidado, apoyado y dispuesto a aprender. Sabemos que los ambientes seguros ayudan a los cerebros a estar sanos, a aprender, y ayudan a encontrar el sentido.
- La influencia de los iguales puede llevar a asuntos peligrosos o pueden ser un gran apoyo para los adolescentes, porque entre ellos hablan de sus preocupaciones. Hay que dotarles de herramientas para saber identificar cuándo es necesario recurrir a un adulto o profesional: cuando hay autolesiones, desorden alimenticio, ansiedad patológica o incluso señales de suicidio, entre otros. Se necesita formar a los iguales en cómo apoyar a sus compañeros y compañeras.
- Un aspecto básico al que a veces no se le da la importancia que tiene es dormir las horas suficientes, descansar.
- En cuanto a las pantallas, hay que enseñarles a ser consumidores responsables. Que sean críticos con lo que ven, identificar qué es beneficioso, les va a ayudar a desarrollar la creatividad e identificar lo que no les va a aportar nada. Necesitan adquirir las herramientas para tomar decisiones teniendo toda la información.
- No prohibir sino acompañar. No debemos asumir que están perdiendo el tiempo cuando están con el móvil. En los estudios recientes de los últimos cuatro años, muchos adolescentes han manifestado que la razón número uno para usar las redes sociales es porque quieren hacer un mundo mejor y van poniendo su granito de arena compartiendo, colaborando con otras personas.
[Imagen: YouTube]
Maestra de primaria y especialista de inglés