En la actualidad, la tecnología está transformando la educación y abriendo nuevas posibilidades para el profesorado. Una herramienta destacada en esta revolución educativa es ChatGPT, un modelo de lenguaje basado en inteligencia artificial que está dando mucho que hablar pero, al mismo tiempo, genera muchas dudas. El pasado 31 de agosto, OpenAI publicó una sencilla y útil guía para docentes. A continuación, te cuento varias formas en que el profesorado está utilizando ChatGPT para enriquecer o hacer más eficiente su labor en el aula.
Una estrategia consiste en animar al alumnado a utilizar ChatGPT como un compañero virtual para debates. Este compañero puede asumir el rol que le indiquemos, como un oponente que señala debilidades en tus argumentos, un simulador de entrevistas de trabajo o incluso un profesor que ofrece retroalimentación específica. Esta práctica fomenta que el alumnado explore la información en un contexto conversacional, enriqueciendo así su comprensión del material al considerar diferentes perspectivas. Por ejemplo, un alumno o alumna de 6º de primaria puede pedir a ChatGPT que actúe como un profesor para que evalúe una redacción y le indique qué aspectos puede mejorar. Una vez iniciada esa conversación, puede seguir pidiéndole explicaciones, por ejemplo:
«No he entendido por qué dices que el segundo párrafo de mi redacción no es coherente, ¿me lo puedes explicar de otra manera y poner ejemplos?»
Un adecuado dominio del lenguaje académico en cada nivel y etapa es crucial para el éxito educativo. Los docentes están alentando a sus alumnos a utilizar ChatGPT para obtener ayuda con traducciones, mejorar sus habilidades de escritura en diferentes lenguas, practicar conversaciones, consultar dudas ortográficas y gramaticales…
«No entiendo muy bien por qué no significa lo mismo “I’m in hospital” que “I’m at the hospital”. ¿Me lo explicas con unos cuantos ejemplos?»
Una práctica que puede agilizar el trabajo docente es utilizar la inteligencia artificial como asistente en la creación de evaluaciones, exámenes, etc. Podemos compartir con ChatGPT la información que consideremos relevante y solicitar ideas para cuestionarios, actividades o planificaciones, a modo de ejemplos que podemos después analizar, perfilar, modificar, etc. Además, ChatGPT puede hacer que las preguntas sean inclusivas y apropiadas para el nivel de nuestro alumnado, teniendo en cuenta nuestras indicaciones. No olvidemos nunca que esos ejemplos que nos dará pueden servirnos o no, y que somos las y los docentes quienes valoramos y decidimos. Por ejemplo, si quiero ejemplos de preguntas sobre un tema, puedo pedirle que elabore 10 para ver si 4 de ellos me parecen adecuados o me dan ideas para otras diferentes.
«Te paso un tema de historia. Elabora 30 preguntas tipo test para mi clase de 6º de primaria. A continuación, escribe 10 preguntas relevantes, que requieran respuestas desarrolladas que demuestren buena comprensión del tema.»
«Las preguntas que has elaborado son demasiado fáciles para mi alumnado. ¿Puedes hacer una nueva propuesta con un mayor nivel de complejidad?»
La enseñanza de herramientas de IA se asemeja a la enseñanza de la responsabilidad en el uso de Internet. El profesorado está aconsejando a los y las estudiantes que consideren críticamente las respuestas proporcionadas por ChatGPT, recordándoles que estas respuestas pueden no ser siempre precisas o fiables. El objetivo es desarrollar la capacidad de los estudiantes para pensar críticamente y verificar la información a través de múltiples fuentes, promoviendo así habilidades de pensamiento crítico, resolución de problemas y creatividad.
Para implementar estas estrategias, OpenAI nos proporciona en su web otros ejemplos prácticos, incluyendo prompts o requerimientos que podemos usar directamente o adaptar a nuestras necesidades, para convertir el ChatGPT en un asistente personalizado que se ajuste a un uso concreto.
ChatGPT se ha convertido en una herramienta versátil y valiosa para docentes en todo el mundo. Desde el fomento del pensamiento crítico hasta la creación de contenido educativo, ofrece oportunidades para mejorar la enseñanza y el aprendizaje en el aula. Sin embargo, es importante recordar que se trata de una herramienta complementaria y que la experiencia y el juicio de los docentes siguen siendo fundamentales para proporcionar una educación de calidad. Podemos adaptar estas estrategias según nuestras necesidades específicas y aprovechar al máximo el potencial de ChatGPT en el contexto educativo.
