Plataformas Sappho y Adhyayana: respondiendo a las necesidades de las familias desde el diálogo y las evidencias
Compartir con las familias la educación de sus hijos, formar de verdad parte de la misma comunidad, ofrecerles desde los centros educativos la formación que necesitan para mejorar la educación de sus hijos tanto en los aspectos académicos como en los éticos, los sociales o los emocionales es una inquietud compartida y repetida hasta la saciedad por el profesorado y también por las personas que se dedican a la investigación.
Gracias a la mejor investigación hemos aprendido que, en la sociedad dialógica, es imprescindible la cocreación del conocimiento y la construcción de saberes y significados desde el diálogo igualitario entre ciudadanía y personas investigadoras en todas las fases de la investigación. Las plataformas científicas Sappho -sobre género- y Adhyayana -sobre educación- están siendo herramientas muy importantes en el IES Alfonso II de Oviedo para acercarnos a esa formación de familiares realmente dialógica, cocreadora y basada en evidencias. Tal y como expusimos hace poco en la conferencia final del programa de investigación e innovación ALLINTERACT en la sede del Parlamento Europeo en Bruselas, recientemente hemos vivido una experiencia muy transformadora con las familias en este sentido.
Contar con las familias como voluntarias en los grupos interactivos (GI) fue la pieza clave para seguir avanzando en la construcción dialógica de nuestra comunidad soñada, como también nos había demostrado ya la investigación sobre voluntariado y formación de familiares. Dos madres salían de una sesión de GI hablando de las actividades que habían estado haciendo con el alumnado usando Sappho y Adhyayana e hicieron saber a una docente que habían visto enunciadas en las plataformas algunas cosas que les habían llamado la atención y sobre las que querían y necesitaban saber más, de manera que se hizo casi imperativo responder a esa demanda que, por otra parte, era bastante sencilla de organizar.
A los pocos días, un grupo de docentes preparamos una sesión dentro del Sciencethon de ALLINTERACT para acercar a estas familias, y a las que estuvieran interesadas, a las bases de datos, herramientas de búsqueda de evidencias científicas y muy especialmente a estas dos plataformas que se centran precisamente en los temas en los que las familias habían mostrado tanto interés.
En unas pocas horas, nos acercamos con los familiares a Web of Science, a Google Scholar y, finalmente, a las plataformas Sappho y Adhyayana, que resultaron de mayor interés para las familias por resultarles muy prácticas, muy fáciles de usar y porque no solamente daban respuestas basadas en la evidencia a muchas de sus preguntas, sino que además les permitían preguntar, comentar y aportar tanto sus propias experiencias como evidencias que ellos y ellas habían encontrado. Los deberes, la participación de las familias en los centros de educación secundaria, las relaciones afectivosexuales de los adolescentes, la violencia de género, la importancia de las amistades… Los grupos de trabajo que se formaron fueron navegando, dialogando y buscando evidencias que ayudaron a los participantes, según nos comentaron, a despejar algunas dudas, a desenmascarar bulos y también, sobre todo, a descubrir unas potentes y valiosas herramientas para sus vidas diarias.
Apenas han pasado unos días desde esas primeras horas y ya las familias están escribiendo y pidiendo más formación, más sesiones y encuentros en los que puedan indagar en las evidencias a través de las plataformas, pero también dialogar sobre ellas, para seguir avanzando en esa formación dialógica. Son muchos los temas que les inquietan e importan y sobre los que nos piden formación: el uso de la pornografía en la adolescencia y sus consecuencias, el uso de las redes sociales y de los juegos on line… Sobre todos ellos buscaremos evidencias y plantearemos dudas para seguir cocreando y disfrutando y ejerciendo el derecho de acceso a la ciencia.
El impacto de estas actuaciones lo mediremos mejor a medio plazo pero, por lo pronto, sabemos que las familias que han participado en estas formaciones conocen y usan las plataformas, que ya están acudiendo a la investigación y buscando las fuentes más fiables para sus tomas de decisiones sobre la educación de sus hijos, para su vida cotidiana; para su búsqueda, en fin, de una vida más plena, más feliz.